Mientras ha generado millones en tecnología y ha movido el mundo en una dirección de la que ya no se puede volver, ahora Google se ha metido en el mundo de la robótica.
Bajo el lema de las seguridad y eficiencia está generando un proyecto de auto con sistemas que se supone previenen accidentes de tráfico.
El objetivo, según Google es mayor tiempo libre, reducir las emisiones de carborno y seguridad.
Que Google, haga declaraciones de ese tipo ya me hace torcer la cara, cuando realiza, por otro lado, prácticas de monopolio y actividades que desestabilizan gobiernos extranjeros bajo la amenaza de generar guerras internas, con el objetivo de obtener más poder económico.
Ahora se metió en el área de vehículos-robot.
Google, que fue creada por Larry Page y Sergey Brin (mi admiración para sus genios, mi repudio a cómo lo usan), anunciaron la llegada de este nuevo chiche, que funciona sin conductor y que ya está viajando por California.
Autos automatizados, valga la redundancia, son un avance en a robótica, de eso no hay dudas, de lo que temo, es del uso, ya que Google es conocida por recorrer la ciudad, tomando fotos, invadiendo la privacidad de la gente.
Me pregunto qué tecnología alternativa tiene este nuevo proyecto, ya que se sabe que las prácticas de Google desembocan en la misma dirección: recopilar datos, saber más que nadie qué nos pueden vender y luego cobrar por vendernos lo que de todos modos querremos comprar, claro, ellos lo averiguaron antes.
Ya admitieron que los autos están equipados con cámaras de vídeo, sensores de radar, láser para inspeccionar el tránsito, y pude procesar todos esos datos.
¿No les resulta conocido?
Ellos hablan de “seguridad”, que es casi la palabra más usada hasta por dictadores, “seguridad nacional”, llamaban en Argentina a las prácticas de sojuzgamiento y asesinatos.
En nombre de la “seguridad” se realizan muchas prácticas que sirven en la mayoría de los casos para llenarse los bolsillos, ya sea como patovicas, como prácticas mafiosas.
Eso sí, de números Google son capos, aseguran que la prevención de más del millón y medio de muertes por accidente de tránsito por año es el objetivo de este proyecto.
Cuánto tiempo se tardará en comprobar que el dichoso autito recopila más datos que con el sistema actual de patrullar y fotografiar calles, en el mejor de los casos.
Estoy seguro que esa empresa tiene muchos ases sobre la manga; prácticas que ni nos imaginamos que sirven para extraernos algo.
Este asunto no tardará en dar qué hablar, y no en el buen sentido, el lobo pierde los dientes pero no las mañas.
|